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Fundamentar - Artículos Este portal pretende hacer un aporte a la cualificación del debate político y económico en la Argentina. Ponemos ideas en discusión que pretenden servir para que surjan otras visiones que enriquezcan el análisis. https://www.fundamentar.com/articulos/opinion/itemlist/tag/VICTORIA%20VILLARRUEL 2024-05-19T20:20:36-03:00 Joomla! - Open Source Content Management Adolescentes en su laberinto 2024-05-19T11:23:29-03:00 2024-05-19T11:23:29-03:00 https://www.fundamentar.com/articulos/opinion/item/6824-adolescentes-en-su-laberinto Miguel Gómez (*) hola@fundamentar.com <div class="K2FeedImage"><img src="https://www.fundamentar.com/media/k2/items/cache/632c3491b2d391ab015a7b1797d7a51f_S.jpg" alt="Laberinto (1991) - Leonora Carrington" /></div><div class="K2FeedIntroText"></div><div class="K2FeedFullText"><p>Quien haya convivido con adolescentes, y tenga la suficiente edad para haberse olvidado de sus tiempos juveniles, sabrá reconocer que un “después lo hago”, no se le niega a ningún padre que se precie. Esos pequeños seres a quienes amamos, portan consigo una especie de tormenta, con cambios de humor repentino que al mundo adulto suele dejar descolocado. La inmediatez es lo único que importa y el mediano plazo se transforma en espacio de una dimensión absolutamente desconocida sobre el que no se tiene ninguna pretensión.</p> <p>En la semana que pasó, las carencias naturales del mundo libertario impusieron la necesidad de relativizar el logro de algunos objetivos en determinado lapso de tiempo. Si el Pacto de Mayo era la referencia de los días por venir, el cual servía de elemento de presión para la sanción de la ley Bases, por estas horas descubrimos, según la retórica presidencial, que ambos instrumentos no serían tan importantes ni definitivos en su realización, ya que las reformas estructurales se harán de una manera u otra. Pasen y vean. Recorrido por días del “después vemos” libertario que esconde más que lo que muestra.</p> <p>La semana política había comenzado con la “buena” noticia del dato de la inflación de abril que, de acuerdo a lo informado por el Indec, dio 8,8%, confirmando una tendencia a la baja. Apalancados sobre la decisión “populista” de no aplicar los aumentos anunciados sobre las tarifas de gas y luz, el mileismo salió a celebrar el dato como un triunfo en sí mismo. No faltó la participación del presidente en redes ni el coro de operadores periodísticos que nos indican que vamos por el buen camino.</p> <p>Pero también hubo tiempo para homenajes. A 35 años del triunfo de Carlos Menen en las elecciones que derrotó a Eduardo Angeloz (y a 21 de que defeccionara de la participación en un balotaje contra Néstor Kirchner), en la Casa Rosada se descubrió un busto en honor al ex presidente y que la malicia tuitera encontró con un sugestivo parecido al recordado cantante de soul James Brown. Con la presencia de la familia Menem en pleno, Javier Milei no se amilanó al afirmar que el riojano había sido el mejor presidente de la democracia surgida post dictadura.</p> <p>Va de suyo que cualquier gobierno busca un ancla en el pasado como forma de legitimación y referenciación política. El libertarismo ha apostado por dos: la acción política de Julio Argentino Roca de hace 140 años y el ya comentado gobierno de los 90’. En ambos casos incurre en contradicciones flagrantes.</p> <p>Para el primero de ellos, alguien que ha sido considerado el arquitecto del Estado moderno argentino, no deja de ser sugestiva la diferencia teniendo en cuenta que el presidente considera al Estado como una asociación criminal. Y no es que esa clasificación responda a la coyuntura de estos días, sino que se perfecciona con esos indicadores tan discutibles que utiliza el papá de Conan, cuando reivindica los tiempos del “libre” comercio antes de la conformación de los Estado Nación europeos.</p> <figure><img src="https://www.fundamentar.com/images/casa-en-el-laberinto.jpg" alt="Casa en el Laberinto - Yolanda Molina Brañas" /> <figcaption>Casa en el Laberinto - Yolanda Molina Brañas</figcaption> </figure> <p>Para el segundo y del que buena parte de la población adulta argentina ha sido contemporánea, llama la atención la reivindicación de una figura que, si algo supo hacer bien, fue rodearse de la casta política, empresarial, sindical y hasta artística de aquel tiempo y que, si miramos con atención, unos cuantos de ellos siguen teniendo vigencia por estos días.</p> <p>La pregunta refiere a qué se podría valorar de la gestión del riojano. La estabilidad lograda vino de la mano de una desocupación que trepó al 17,58% para 1995 y se mantuvo cercana al 15% para 1999, mientras que la pobreza recibida en el orden del 20% en 1989, había crecido al 27% diez años después. Por las características estructurales de la Convertibilidad, cualquier crisis financiera, por más lejana que se produjera en la distancia, afectaba a las cuentas nacionales. Los casos de corrupción se desarrollaron a lo largo de todo su mandato. Los atentados de la Embajada de Israel y de la AMIA jamás fueron investigados con el profesionalismo debido. Miles de pequeñas y medianas empresas bajaron las persianas. El campo se transformó en una tierra sin valor de la que emigraban para no volver los jóvenes oriundos del lugar. La denigración institucional llegó a tales niveles que se votó alguna ley con un diputado trucho sentado en una banca, y se conformó una mayoría automática en la Corte Suprema que se convirtió en un verdadero lastre público. La explosión de la Fábrica Militar de Río Tercero fue una verdadera ignominia que sirvió para ocultar las pruebas de la vergonzosa e ilegal venta de armas a Ecuador. Las empresas públicas (como YPF o Aerolíneas Argentinas) fueron mal privatizadas por unos pocos dólares, y de esa enajenación surgieron como un grito ahogado los movimientos piqueteros de Salta y Cutral Có.  De la trampa, de la personalización, del individualismo y de la mal entendida picardía política se hizo un culto.</p> <p>Milei reivindica ese tiempo social con datos falsos (salarios promedio de U$s1800) y sobre la ignorancia de buena parte de sus seguidores que, como un pecado de juventud, se creen con el derecho de ignorar la historia reciente. De alguna forma, la sociedad argentina ya juzgó a Carlos Menem: nadie, más allá de sus seguidores más cercanos, lo tiene como una referencia de horizonte y su muerte, ocurrida bajo el ramplón artilugio de ser una especie de senador vitalicio que le habilitaba los fueros para no quedar detenido, lo sorprendió sin el más mínimo reconocimiento popular. Los honores institucionales son otra cosa.</p> <p>En ese devenir de tirar todo para adelante, la ley Bases no sólo que no puede ser sancionada sino que ni siquiera el oficialismo logra un dictamen de mayoría (aunque sea con cambios de lo aprobado en la Cámara de Diputados), para que sea tratada en el recinto.</p> <p>La dificultad por lograr su aprobación, no sólo se sustancia en la atomización de las fuerzas opositoras que ya hemos comentado en artículos anteriores, sino en el propio internismo oficialista, que pretende mostrar como una novedad de valor, que la vicepresidenta Victoria Villarruel se reúna con funcionarios del Poder Ejecutivo para coordinar acciones con el fin de garantizar la sanción en la Cámara de Senadores.</p> <p>A esta altura del mes y de acuerdo a lo visto en los últimos días, el Senado se encuentra en una situación de bloqueo donde los 33 votos en contra de Unión por la Patria (UxP) parecen estar consolidados, mientras que el oficialismo no logra alcanzar un número mayor. Los días pasan y vale preguntarse cuánto hay de cosmética para la negociación y cuánto de estructural en las negativas de oficialistas y de opositores friendly para llegar a un acuerdo relativamente definitivo.</p> <figure><img src="https://www.fundamentar.com/images/laberinto-de-horta-barcelona--freixas-cortes.jpg" alt="Laberinto de Horta Barcelona - Freixas Cortés" /> <figcaption>Laberinto de Horta Barcelona - Freixas Cortés</figcaption> </figure> <p>Para el Ejecutivo, que viene perdiendo articulado de la ley en el camino de manera sistemática parece haber llegado el tiempo de dejar de ceder. Pero eso es sólo una ilusión ante el hipotético escenario de una derrota que quede garantizada por el escaso número de los cuatro votos que le faltan a UxP para hacer caer el proyecto.</p> <p>Para los opositores amigables, por ejemplo, la sobre exposición del tema RIGI o de la reimposición de ganancias en determinadas provincias (las patagónicas tienen un buen número de trabajadores y trabajadoras que quedarían alcanzados por el impuesto), no son fáciles de aceptar ya que afectan a ciertas regiones de manera determinante. No resulta nada fácil volver a la provincia y explicar que las empresas locales quedarán en una posición de marcada desigualdad frente a las inversiones extranjeras o que, los ya afectados bolsillos, sufrirán aún más recortes al comienzo de cada mes.</p> <p>Para el libertarismo el problema no radica sólo en la aprobación o no de la ley. También queda condicionado el Pacto de Mayo en Córdoba, ya que, al haber anunciado que su realización dependía del resultado de la mayor (y única) propuesta legislativa del oficialismo, las idas y vueltas vienen siendo constantes. En el término de una semana se anunció que se realizaría igual sin que la ley esté formalmente aprobada, luego que habría “pacto” pero sin invitación a los gobernadores y con una especie de celebración libertaria en las calles de la Docta y este viernes, finalmente, se oficializó que se piensa en junio o julio como fecha de concreción y que tal vez Rosario pueda ser el lugar elegido en el Día de la Bandera. Si es así, sería una excelente oportunidad para que el Poder Ejecutivo Nacional reactive las obras detenidas por falta de fondos en el querido e histórico monumento. Debe reconocerse que en el fondo, a veces, no hay mal que por bien no venga.</p> <p>Ese ir y venir parece una práctica adolescente que no puede ser ocultada ni siquiera con el colaboracionismo explícito de gobernadores de la talla de Martín Llaryora que, con su cordobesismo congénito a cuestas, en una misma frase puede parecerse al más lúcido de los peronistas, a partir de lo que, se da por sentado, es su acción de gestión en Córdoba y el rol del Estado, como así también al más predispuesto de los libertarios para sacar al país del atraso. “Ventajas” de comportarse dentro del esquema de partidos tipo “catch all” (atrapa todo), donde la principal característica ideológica de cada uno de ellos es que se actúa como si esa condición no existiera. Como diría aquella vieja canción sabinera “como te digo una co’, te digo la o’…”.</p> <p>Aunque no recaigan sobre los sectores que se habían prometido en la campaña (a quién le importa eso a estas alturas de los acontecimientos), la licuadora y la motosierra parecen ir cumpliendo sus objetivos. Así como transformarse en adulto requiere de bastante más que tener cierta independencia de movimiento de los padres, la política importante, esa que se juega en las grandes ligas, exige más que redes, berrinches autoritarios y encuentros con amigos en el extranjero.</p> <p>Cinco meses sin ningún proyecto aprobado con interés para el oficialismo en el Congreso, en la etapa que, se supone, se cuenta con mayor empatía social, muestra los límites del libertarismo que supimos conseguir. Habrá que ver si madura…</p> <p>(*) Analista político de Fundamentar - <a href="https://x.com/miguelhergomez" target="_blank" rel="noopener noreferrer">@miguelhergomez</a></p></div> <div class="K2FeedImage"><img src="https://www.fundamentar.com/media/k2/items/cache/632c3491b2d391ab015a7b1797d7a51f_S.jpg" alt="Laberinto (1991) - Leonora Carrington" /></div><div class="K2FeedIntroText"></div><div class="K2FeedFullText"><p>Quien haya convivido con adolescentes, y tenga la suficiente edad para haberse olvidado de sus tiempos juveniles, sabrá reconocer que un “después lo hago”, no se le niega a ningún padre que se precie. Esos pequeños seres a quienes amamos, portan consigo una especie de tormenta, con cambios de humor repentino que al mundo adulto suele dejar descolocado. La inmediatez es lo único que importa y el mediano plazo se transforma en espacio de una dimensión absolutamente desconocida sobre el que no se tiene ninguna pretensión.</p> <p>En la semana que pasó, las carencias naturales del mundo libertario impusieron la necesidad de relativizar el logro de algunos objetivos en determinado lapso de tiempo. Si el Pacto de Mayo era la referencia de los días por venir, el cual servía de elemento de presión para la sanción de la ley Bases, por estas horas descubrimos, según la retórica presidencial, que ambos instrumentos no serían tan importantes ni definitivos en su realización, ya que las reformas estructurales se harán de una manera u otra. Pasen y vean. Recorrido por días del “después vemos” libertario que esconde más que lo que muestra.</p> <p>La semana política había comenzado con la “buena” noticia del dato de la inflación de abril que, de acuerdo a lo informado por el Indec, dio 8,8%, confirmando una tendencia a la baja. Apalancados sobre la decisión “populista” de no aplicar los aumentos anunciados sobre las tarifas de gas y luz, el mileismo salió a celebrar el dato como un triunfo en sí mismo. No faltó la participación del presidente en redes ni el coro de operadores periodísticos que nos indican que vamos por el buen camino.</p> <p>Pero también hubo tiempo para homenajes. A 35 años del triunfo de Carlos Menen en las elecciones que derrotó a Eduardo Angeloz (y a 21 de que defeccionara de la participación en un balotaje contra Néstor Kirchner), en la Casa Rosada se descubrió un busto en honor al ex presidente y que la malicia tuitera encontró con un sugestivo parecido al recordado cantante de soul James Brown. Con la presencia de la familia Menem en pleno, Javier Milei no se amilanó al afirmar que el riojano había sido el mejor presidente de la democracia surgida post dictadura.</p> <p>Va de suyo que cualquier gobierno busca un ancla en el pasado como forma de legitimación y referenciación política. El libertarismo ha apostado por dos: la acción política de Julio Argentino Roca de hace 140 años y el ya comentado gobierno de los 90’. En ambos casos incurre en contradicciones flagrantes.</p> <p>Para el primero de ellos, alguien que ha sido considerado el arquitecto del Estado moderno argentino, no deja de ser sugestiva la diferencia teniendo en cuenta que el presidente considera al Estado como una asociación criminal. Y no es que esa clasificación responda a la coyuntura de estos días, sino que se perfecciona con esos indicadores tan discutibles que utiliza el papá de Conan, cuando reivindica los tiempos del “libre” comercio antes de la conformación de los Estado Nación europeos.</p> <figure><img src="https://www.fundamentar.com/images/casa-en-el-laberinto.jpg" alt="Casa en el Laberinto - Yolanda Molina Brañas" /> <figcaption>Casa en el Laberinto - Yolanda Molina Brañas</figcaption> </figure> <p>Para el segundo y del que buena parte de la población adulta argentina ha sido contemporánea, llama la atención la reivindicación de una figura que, si algo supo hacer bien, fue rodearse de la casta política, empresarial, sindical y hasta artística de aquel tiempo y que, si miramos con atención, unos cuantos de ellos siguen teniendo vigencia por estos días.</p> <p>La pregunta refiere a qué se podría valorar de la gestión del riojano. La estabilidad lograda vino de la mano de una desocupación que trepó al 17,58% para 1995 y se mantuvo cercana al 15% para 1999, mientras que la pobreza recibida en el orden del 20% en 1989, había crecido al 27% diez años después. Por las características estructurales de la Convertibilidad, cualquier crisis financiera, por más lejana que se produjera en la distancia, afectaba a las cuentas nacionales. Los casos de corrupción se desarrollaron a lo largo de todo su mandato. Los atentados de la Embajada de Israel y de la AMIA jamás fueron investigados con el profesionalismo debido. Miles de pequeñas y medianas empresas bajaron las persianas. El campo se transformó en una tierra sin valor de la que emigraban para no volver los jóvenes oriundos del lugar. La denigración institucional llegó a tales niveles que se votó alguna ley con un diputado trucho sentado en una banca, y se conformó una mayoría automática en la Corte Suprema que se convirtió en un verdadero lastre público. La explosión de la Fábrica Militar de Río Tercero fue una verdadera ignominia que sirvió para ocultar las pruebas de la vergonzosa e ilegal venta de armas a Ecuador. Las empresas públicas (como YPF o Aerolíneas Argentinas) fueron mal privatizadas por unos pocos dólares, y de esa enajenación surgieron como un grito ahogado los movimientos piqueteros de Salta y Cutral Có.  De la trampa, de la personalización, del individualismo y de la mal entendida picardía política se hizo un culto.</p> <p>Milei reivindica ese tiempo social con datos falsos (salarios promedio de U$s1800) y sobre la ignorancia de buena parte de sus seguidores que, como un pecado de juventud, se creen con el derecho de ignorar la historia reciente. De alguna forma, la sociedad argentina ya juzgó a Carlos Menem: nadie, más allá de sus seguidores más cercanos, lo tiene como una referencia de horizonte y su muerte, ocurrida bajo el ramplón artilugio de ser una especie de senador vitalicio que le habilitaba los fueros para no quedar detenido, lo sorprendió sin el más mínimo reconocimiento popular. Los honores institucionales son otra cosa.</p> <p>En ese devenir de tirar todo para adelante, la ley Bases no sólo que no puede ser sancionada sino que ni siquiera el oficialismo logra un dictamen de mayoría (aunque sea con cambios de lo aprobado en la Cámara de Diputados), para que sea tratada en el recinto.</p> <p>La dificultad por lograr su aprobación, no sólo se sustancia en la atomización de las fuerzas opositoras que ya hemos comentado en artículos anteriores, sino en el propio internismo oficialista, que pretende mostrar como una novedad de valor, que la vicepresidenta Victoria Villarruel se reúna con funcionarios del Poder Ejecutivo para coordinar acciones con el fin de garantizar la sanción en la Cámara de Senadores.</p> <p>A esta altura del mes y de acuerdo a lo visto en los últimos días, el Senado se encuentra en una situación de bloqueo donde los 33 votos en contra de Unión por la Patria (UxP) parecen estar consolidados, mientras que el oficialismo no logra alcanzar un número mayor. Los días pasan y vale preguntarse cuánto hay de cosmética para la negociación y cuánto de estructural en las negativas de oficialistas y de opositores friendly para llegar a un acuerdo relativamente definitivo.</p> <figure><img src="https://www.fundamentar.com/images/laberinto-de-horta-barcelona--freixas-cortes.jpg" alt="Laberinto de Horta Barcelona - Freixas Cortés" /> <figcaption>Laberinto de Horta Barcelona - Freixas Cortés</figcaption> </figure> <p>Para el Ejecutivo, que viene perdiendo articulado de la ley en el camino de manera sistemática parece haber llegado el tiempo de dejar de ceder. Pero eso es sólo una ilusión ante el hipotético escenario de una derrota que quede garantizada por el escaso número de los cuatro votos que le faltan a UxP para hacer caer el proyecto.</p> <p>Para los opositores amigables, por ejemplo, la sobre exposición del tema RIGI o de la reimposición de ganancias en determinadas provincias (las patagónicas tienen un buen número de trabajadores y trabajadoras que quedarían alcanzados por el impuesto), no son fáciles de aceptar ya que afectan a ciertas regiones de manera determinante. No resulta nada fácil volver a la provincia y explicar que las empresas locales quedarán en una posición de marcada desigualdad frente a las inversiones extranjeras o que, los ya afectados bolsillos, sufrirán aún más recortes al comienzo de cada mes.</p> <p>Para el libertarismo el problema no radica sólo en la aprobación o no de la ley. También queda condicionado el Pacto de Mayo en Córdoba, ya que, al haber anunciado que su realización dependía del resultado de la mayor (y única) propuesta legislativa del oficialismo, las idas y vueltas vienen siendo constantes. En el término de una semana se anunció que se realizaría igual sin que la ley esté formalmente aprobada, luego que habría “pacto” pero sin invitación a los gobernadores y con una especie de celebración libertaria en las calles de la Docta y este viernes, finalmente, se oficializó que se piensa en junio o julio como fecha de concreción y que tal vez Rosario pueda ser el lugar elegido en el Día de la Bandera. Si es así, sería una excelente oportunidad para que el Poder Ejecutivo Nacional reactive las obras detenidas por falta de fondos en el querido e histórico monumento. Debe reconocerse que en el fondo, a veces, no hay mal que por bien no venga.</p> <p>Ese ir y venir parece una práctica adolescente que no puede ser ocultada ni siquiera con el colaboracionismo explícito de gobernadores de la talla de Martín Llaryora que, con su cordobesismo congénito a cuestas, en una misma frase puede parecerse al más lúcido de los peronistas, a partir de lo que, se da por sentado, es su acción de gestión en Córdoba y el rol del Estado, como así también al más predispuesto de los libertarios para sacar al país del atraso. “Ventajas” de comportarse dentro del esquema de partidos tipo “catch all” (atrapa todo), donde la principal característica ideológica de cada uno de ellos es que se actúa como si esa condición no existiera. Como diría aquella vieja canción sabinera “como te digo una co’, te digo la o’…”.</p> <p>Aunque no recaigan sobre los sectores que se habían prometido en la campaña (a quién le importa eso a estas alturas de los acontecimientos), la licuadora y la motosierra parecen ir cumpliendo sus objetivos. Así como transformarse en adulto requiere de bastante más que tener cierta independencia de movimiento de los padres, la política importante, esa que se juega en las grandes ligas, exige más que redes, berrinches autoritarios y encuentros con amigos en el extranjero.</p> <p>Cinco meses sin ningún proyecto aprobado con interés para el oficialismo en el Congreso, en la etapa que, se supone, se cuenta con mayor empatía social, muestra los límites del libertarismo que supimos conseguir. Habrá que ver si madura…</p> <p>(*) Analista político de Fundamentar - <a href="https://x.com/miguelhergomez" target="_blank" rel="noopener noreferrer">@miguelhergomez</a></p></div> Desarma y sangra 2024-03-24T09:22:51-03:00 2024-03-24T09:22:51-03:00 https://www.fundamentar.com/articulos/opinion/item/6809-desarma-y-sangra Miguel Gómez (*) hola@fundamentar.com <div class="K2FeedImage"><img src="https://www.fundamentar.com/media/k2/items/cache/18b357a1a2beae876f35fb2080c8afbf_S.jpg" alt="Desarma y sangra" /></div><div class="K2FeedIntroText"><h3 style="text-align: right;"><em>Miro alrededor, heridas que vienen,</em><br /><em> sospechas que van y aquí estoy,</em><br /><em> pensando en el alma que piensa</em><br /><em> Y por pensar no es alma, desarma y sangra…</em></h3> <h3 style="text-align: right;">“Desarma y Sangra” - Serú Girán</h3></div><div class="K2FeedFullText"><p>Diferencias expuestas a la luz pública. Chicanas divertidas y peyorativas que esconden diferencias profundas de antaño. Papelones institucionales que no se recortan sólo al plano interno sino que alcanzan al ámbito de las relaciones internacionales. Idas y venidas con temas sensibles que en poco menos de 72 horas cambian sin mayores explicaciones. Todo eso ofrece el mundo libertario en este puntual otoño del 2024. Con el intento permanente y sistemático de “re” institucionalizar procesos que se sustancian en décadas de lucha social, la semana estuvo plagada de esa esencia mileista de instalar novedades que mueren al poco tiempo de nacer. Días de desavenencias profundas y una esperanza con vestido de domingo. Pasen y vean. Son todos bien recibidos en un banquete así.</p> <p>Es indudable que la sorpresa es un gen constitutivo de Javier Milei en tanto líder libertario del presente siglo XXI. Si bien esa característica de su personalidad política no es extensible a casi ninguno de sus funcionarios, en la presente coyuntura le alcanza para no perder centralidad, factor definitivo cuando se conduce un espacio desde la más elemental condición de minoría.</p> <p>Algo de todo ello sucedió en la semana con el anuncio de la propuesta de los dos nombres que actuarían como candidatos para integrar Corte Suprema de Justicia de la Nación. Ariel Lijo por un lado y Manuel García Mansilla por el otro, ganaron los títulos de diarios, noticieros y portales a partir del anuncio promovido desde la virtual Oficina de Prensa de Presidencia. El primero de ellos ocuparía el lugar que quedó vacante a partir de la salida de Elena Highton de Nolasco y el segundo, y aquí lo distintivo del caso, resulta propuesto con una anticipación de más de nueve meses ya que el Dr. Juan Carlos Maqueda, uno de los cuatro integrantes actuales, cumple 75 años en diciembre, edad límite que impone la Constitución Nacional para el ejercicio del cargo.</p> <p>En algún momento sabremos si Maqueda había pre anunciado de manera reservada su salida o si, el nombre de García Mansilla termina siendo un señuelo para apurar la eyección del experimentado cortesano. Decimos esto dado que vale recordar los casos de Carlos Fayt (que administró justicia hasta los 97 años, puesto que había jurado por la Carta Magna anterior que no imponía límites etarios) y la nombrada Highton de Nolasco que supo obtener un amparo de primera instancia que, bajo el argumento de que los constituyentes se habían excedido en sus atribuciones al reformar el artículo 99 de la CN, le permitió continuar en el cargo hasta el año 2021, quedando por encima de la renovada Constitución y por la cual había jurado. Deleites del institucionalismo argento.</p> <p>https://twitter.com/OPRArgentina/status/1770489402050945372</p> <p>Más allá de que el hombre antiguamente vinculado al duhaldismo acepte o no su jubilación de facto, no deja de ser evidente el intento mileista de empezar a delinear una corte más cercana a sus intereses y espectro ideológico. Si ponemos en la balanza las coincidencias con el actual decano de la Universidad Austral, referente del Opus Dei que supo afirmar que “el aborto es un delito, que tiene algunas causales de no punibilidad previstas en el Código Penal”, y que el nombramiento de Lijo supone un acuerdo con Ricardo Lorenzetti, personaje que quedó definitivamente herido de la componenda entre Carlos Rozenkrantz y Horacio Rosatti, circunstancia que lo alejó de la conducción del máximo tribunal de justicia; veremos para qué lado se puede empezar a mover el péndulo. “Cambia, todo cambia” habrá pensado el rafaelino y mientras intenta descubrir si es real o no, que la venganza es un plato que se sirve frío.</p> <p>Pero la duda principal no radica ni en Balcarce 50 ni en el cuarto piso de Talcahuano 550, sino a unas escasas cuadras de allí, en el edificio del Congreso de la Nación, ya que nadie sabe a ciencia cierta, cuánto respaldo podrían obtener estos nombres. Recordemos que se necesitan de las 2/3 partes de los miembros del Senado para promover a un juez de la Corte Suprema y que los nominados enfrentan tres condicionamientos:</p> <p>1. Lijo supo ganarse la enemistad de buena parte del sistema político, con acciones funcionales al Lawfare pero también con la decisión de no haber cerrado la causa Correo, factor que inquieta al ex presidente Mauricio Macri.</p> <p>2. Si García Mansilla es un convencido defensor de la causa anti aborto, en una cámara de Senadores que hace muy poco tiempo modificó su composición, pero no lo suficiente para cambiar el clima de época que impuso el triunfo feminista de transformar en ley la interrupción voluntaria del embarazo; cuesta imaginar que esa misma institución habilite la designación de alguien que quedaría en condiciones de decretar la inconstitucionalidad de la norma sancionada a finales de 2020.</p> <p>3. No han sido pocas las voces que se han quejado de la falta de perspectiva de género en esa hipotética configuración cortesana de futuro, cuestión que bien reconocía el ya famoso Decreto 222/03 que supo imponer Néstor Kirchner, y que se transformó en la institucionalización de una sus mejores políticas y que, de acuerdo a lo que dejaron trascender desde el oficialismo, se apostaría por su modificación. Desarmar para volver, de alguna manera, décadas atrás.</p> <p>Pero el anuncio de los hipotéticos futuros cortesanos no vino acompañado del conjunto libertario sino de la decisión individual del propio Milei, cuestión que quedó evidenciada en lo que reconoció la propia vicepresidenta Victoria Villarruel, cuando en una nota brindada al comunicador oficialista Jonatan Viale, reconoció que, en la previa, no estaba enterada de la propuesta presidencial, como así tampoco ninguno de los siete senadores con que cuenta La Libertad Avanza en la cámara alta. </p> <p>Pero la entrevista con el hijo de Mauro, no quedó solo en eso. Más allá de algún comentario divertido (“jamoncito del medio”), la cual sólo puede ser utilizada para alguna chicana de ocasión, la nota televisada por TN sirvió como demostración palmaria de las diferencias que subsisten en el mundo oficialista, ya que Villarruel no se privó de cuestionar el proyecto ideado por el ministro de Defensa Luis Petri, que habilita a que las fuerzas armadas puedan intervenir en la lucha contra el narcotráfico.</p> <p>En las antípodas del sentido de la ley, pero con la misma conclusión final, la vicepresidenta afirma que el flamante proyecto se aplicaría sobre la población civil y que por lo tanto, las fuerzas armadas no están preparadas para tal fin. Como militante defensora de genocidas, y en clara referencia a lo sucedido desde marzo 1976, se preguntó en voz alta dónde estaban aquellos que intervinieron la última vez en la lucha contra civiles, y se respondió a sí misma: “presos”.</p> <p>https://twitter.com/todonoticias/status/1770966031416078594</p> <p>Más allá de la fluidez de la entrevista, de las anécdotas simpáticas y del poco formalismo de la misma, el encuentro sirvió para saldar viejas “cuitas” con Patricia Bullrich y Petri, y por elevación, con el primer mandatario. Recordemos que el acuerdo de campaña suponía que la actual vice manejaría esas áreas. Si la foto trucada de comienzos de semana (que llamativamente mostraba a un Milei más alto), intentaba mostrar que todo estaba bien en el binomio, los dichos vicepresidenciales lograron desactivar el virtual intento.</p> <p>Lo llamativo del asunto, y a contramano de lo sucedido días atrás con el anuncio del tratamiento del DNU 70/23 en el Senado, cuando un ejército de trolls salió a vituperar a Villarruel, en esta ocasión la entrevista no fue revisada por las tropas libertarias de redes. ¿Aprendizaje o datos reservados de que “Vicky”, hoy, mide mejor que el presidente? Vaya uno a saber. A veces algunos silencios dicen demasiado.</p> <p>En la soledad de su construcción, y acá no nos referimos solamente a su centralidad, sino a la falta de “cuadros” que hagan política más allá de cierto institucionalismo que tiene proa al 25 de mayo, Milei no se priva de las contradicciones. De las que vienen del período electoral y de esas que viran el sentido de las afirmaciones en cuestión de horas.</p> <p>Si la promesa de campaña hacía referencia a “vouchers” que se otorgarían para que cada uno eligiera libremente a qué escuela mandar a sus hijos, en la semana conocimos que los dichos referían a un simple subsidio que sólo alcanza a una porción muy pequeña del universo prometido.</p> <p>https://twitter.com/OPRArgentina/status/1771334724948001156</p> <p>Para mayor demostración de los vaivenes discursivos, si el fin de semana se declaraba que el gobierno intentaría aprobar una reforma en el cálculo del pago a jubilados vía ley sancionada por el Congreso de la Nación, el viernes a la noche se anunciaba, vía comunicado de la OPRA, que se emitiría un nuevo DNU que otorgará “un aumento jubilatorio para el mes de abril, a partir de la licuación ocasionada por la fórmula sancionada por la anterior administración”. Nada dice de la propia inflación generada a partir de la asunción de Javier Milei (60%, sin contar marzo) y si eso tendrá algún tipo de compensación.</p> <p>Desarmar un entramado legal, alcanzado con los consensos que impone la democracia, y no pensada para la inflación galopante que hemos sabido conseguir y que expresa la voluntad de UNO en nombre de cierta celeridad, se parece más al intento desesperado de evitar un acuerdo legislativo (que no está lejos) que le imponga al oficialismo otro marco legal que no sea de su agrado.</p> <p>Se avecina el 24 de marzo y ante lo que será, seguramente, una movilización de proporciones, el oficialismo hizo circular el globo de ensayo de que se prepara un indulto para el conjunto de represores juzgados y encarcelados, como así también para aquellos que aún están en proceso. Rápidamente, buena parte del entramado del sistema político y de la sociedad civil, recordó el carácter ilegal de la medida, violatoria de no pocos acuerdos y tratados internacionales que ha suscripto el Estado nacional. Parece que la contundente respuesta sirvió para sacar el tema de agenda, no sin antes haber eliminado el acto oficial que era costumbre, a la par de desechar la idea de cualquier sorpresa que termine activando mayores malestares, circunscribiéndose el aporte oficial a un mero video que intentará reflotar la teoría de los dos demonios. Más allá de los intereses de la vicepresidenta, el mundo libertario no tiene ningún interés en el tema y lo más seguro es que, velozmente, quiera pasar pantalla.</p> <p>https://twitter.com/abuelasdifusion/status/1771879620687593854</p> <p>El mileismo se considera protagonista de un momento único e histórico. Creen en la versión antojadiza que llegó para refundar la Argentina desde sus cimientos y en ese devenir, desarmar todo atisbo de vida comunitaria, plena y para todos. Por estas horas asistimos a la temeraria promesa de la eliminación de miles de puestos de trabajo en el sector estatal. Por goteo que incluyen cientos de telegramas, que se dirigen a personas que exceden la lógica de la planilla de Excel, decenas de áreas del Estado que no casualmente han adolecido de los nombramientos políticos de rigor, se enfrentan al dilema de su desaparición. Medios oficiales incluidos, eliminando la posibilidad de otra forma de comunicación que existe, que es real y que refiere a la Argentina profunda que nada tiene que ver con el día a día de las grandes urbes.</p> <p>Desarman un país, para que nosotros sangremos. Tal vez el domingo, con el inconmensurable ejemplo y guía de Madres y Abuelas, encontremos algo de calma y regocijo. A tientas, sin saber del todo que trole hay que tomar para seguir, pero con la inocultable convicción del NUNCA MÁS. Aunque ahora crean que puedan reversionar la historia a su antojo.</p> <p>(*) Analista político de Fundamentar - <a href="https://twitter.com/miguelhergomez" target="_blank" rel="noopener noreferrer">@miguelhergomez</a></p></div> <div class="K2FeedImage"><img src="https://www.fundamentar.com/media/k2/items/cache/18b357a1a2beae876f35fb2080c8afbf_S.jpg" alt="Desarma y sangra" /></div><div class="K2FeedIntroText"><h3 style="text-align: right;"><em>Miro alrededor, heridas que vienen,</em><br /><em> sospechas que van y aquí estoy,</em><br /><em> pensando en el alma que piensa</em><br /><em> Y por pensar no es alma, desarma y sangra…</em></h3> <h3 style="text-align: right;">“Desarma y Sangra” - Serú Girán</h3></div><div class="K2FeedFullText"><p>Diferencias expuestas a la luz pública. Chicanas divertidas y peyorativas que esconden diferencias profundas de antaño. Papelones institucionales que no se recortan sólo al plano interno sino que alcanzan al ámbito de las relaciones internacionales. Idas y venidas con temas sensibles que en poco menos de 72 horas cambian sin mayores explicaciones. Todo eso ofrece el mundo libertario en este puntual otoño del 2024. Con el intento permanente y sistemático de “re” institucionalizar procesos que se sustancian en décadas de lucha social, la semana estuvo plagada de esa esencia mileista de instalar novedades que mueren al poco tiempo de nacer. Días de desavenencias profundas y una esperanza con vestido de domingo. Pasen y vean. Son todos bien recibidos en un banquete así.</p> <p>Es indudable que la sorpresa es un gen constitutivo de Javier Milei en tanto líder libertario del presente siglo XXI. Si bien esa característica de su personalidad política no es extensible a casi ninguno de sus funcionarios, en la presente coyuntura le alcanza para no perder centralidad, factor definitivo cuando se conduce un espacio desde la más elemental condición de minoría.</p> <p>Algo de todo ello sucedió en la semana con el anuncio de la propuesta de los dos nombres que actuarían como candidatos para integrar Corte Suprema de Justicia de la Nación. Ariel Lijo por un lado y Manuel García Mansilla por el otro, ganaron los títulos de diarios, noticieros y portales a partir del anuncio promovido desde la virtual Oficina de Prensa de Presidencia. El primero de ellos ocuparía el lugar que quedó vacante a partir de la salida de Elena Highton de Nolasco y el segundo, y aquí lo distintivo del caso, resulta propuesto con una anticipación de más de nueve meses ya que el Dr. Juan Carlos Maqueda, uno de los cuatro integrantes actuales, cumple 75 años en diciembre, edad límite que impone la Constitución Nacional para el ejercicio del cargo.</p> <p>En algún momento sabremos si Maqueda había pre anunciado de manera reservada su salida o si, el nombre de García Mansilla termina siendo un señuelo para apurar la eyección del experimentado cortesano. Decimos esto dado que vale recordar los casos de Carlos Fayt (que administró justicia hasta los 97 años, puesto que había jurado por la Carta Magna anterior que no imponía límites etarios) y la nombrada Highton de Nolasco que supo obtener un amparo de primera instancia que, bajo el argumento de que los constituyentes se habían excedido en sus atribuciones al reformar el artículo 99 de la CN, le permitió continuar en el cargo hasta el año 2021, quedando por encima de la renovada Constitución y por la cual había jurado. Deleites del institucionalismo argento.</p> <p>https://twitter.com/OPRArgentina/status/1770489402050945372</p> <p>Más allá de que el hombre antiguamente vinculado al duhaldismo acepte o no su jubilación de facto, no deja de ser evidente el intento mileista de empezar a delinear una corte más cercana a sus intereses y espectro ideológico. Si ponemos en la balanza las coincidencias con el actual decano de la Universidad Austral, referente del Opus Dei que supo afirmar que “el aborto es un delito, que tiene algunas causales de no punibilidad previstas en el Código Penal”, y que el nombramiento de Lijo supone un acuerdo con Ricardo Lorenzetti, personaje que quedó definitivamente herido de la componenda entre Carlos Rozenkrantz y Horacio Rosatti, circunstancia que lo alejó de la conducción del máximo tribunal de justicia; veremos para qué lado se puede empezar a mover el péndulo. “Cambia, todo cambia” habrá pensado el rafaelino y mientras intenta descubrir si es real o no, que la venganza es un plato que se sirve frío.</p> <p>Pero la duda principal no radica ni en Balcarce 50 ni en el cuarto piso de Talcahuano 550, sino a unas escasas cuadras de allí, en el edificio del Congreso de la Nación, ya que nadie sabe a ciencia cierta, cuánto respaldo podrían obtener estos nombres. Recordemos que se necesitan de las 2/3 partes de los miembros del Senado para promover a un juez de la Corte Suprema y que los nominados enfrentan tres condicionamientos:</p> <p>1. Lijo supo ganarse la enemistad de buena parte del sistema político, con acciones funcionales al Lawfare pero también con la decisión de no haber cerrado la causa Correo, factor que inquieta al ex presidente Mauricio Macri.</p> <p>2. Si García Mansilla es un convencido defensor de la causa anti aborto, en una cámara de Senadores que hace muy poco tiempo modificó su composición, pero no lo suficiente para cambiar el clima de época que impuso el triunfo feminista de transformar en ley la interrupción voluntaria del embarazo; cuesta imaginar que esa misma institución habilite la designación de alguien que quedaría en condiciones de decretar la inconstitucionalidad de la norma sancionada a finales de 2020.</p> <p>3. No han sido pocas las voces que se han quejado de la falta de perspectiva de género en esa hipotética configuración cortesana de futuro, cuestión que bien reconocía el ya famoso Decreto 222/03 que supo imponer Néstor Kirchner, y que se transformó en la institucionalización de una sus mejores políticas y que, de acuerdo a lo que dejaron trascender desde el oficialismo, se apostaría por su modificación. Desarmar para volver, de alguna manera, décadas atrás.</p> <p>Pero el anuncio de los hipotéticos futuros cortesanos no vino acompañado del conjunto libertario sino de la decisión individual del propio Milei, cuestión que quedó evidenciada en lo que reconoció la propia vicepresidenta Victoria Villarruel, cuando en una nota brindada al comunicador oficialista Jonatan Viale, reconoció que, en la previa, no estaba enterada de la propuesta presidencial, como así tampoco ninguno de los siete senadores con que cuenta La Libertad Avanza en la cámara alta. </p> <p>Pero la entrevista con el hijo de Mauro, no quedó solo en eso. Más allá de algún comentario divertido (“jamoncito del medio”), la cual sólo puede ser utilizada para alguna chicana de ocasión, la nota televisada por TN sirvió como demostración palmaria de las diferencias que subsisten en el mundo oficialista, ya que Villarruel no se privó de cuestionar el proyecto ideado por el ministro de Defensa Luis Petri, que habilita a que las fuerzas armadas puedan intervenir en la lucha contra el narcotráfico.</p> <p>En las antípodas del sentido de la ley, pero con la misma conclusión final, la vicepresidenta afirma que el flamante proyecto se aplicaría sobre la población civil y que por lo tanto, las fuerzas armadas no están preparadas para tal fin. Como militante defensora de genocidas, y en clara referencia a lo sucedido desde marzo 1976, se preguntó en voz alta dónde estaban aquellos que intervinieron la última vez en la lucha contra civiles, y se respondió a sí misma: “presos”.</p> <p>https://twitter.com/todonoticias/status/1770966031416078594</p> <p>Más allá de la fluidez de la entrevista, de las anécdotas simpáticas y del poco formalismo de la misma, el encuentro sirvió para saldar viejas “cuitas” con Patricia Bullrich y Petri, y por elevación, con el primer mandatario. Recordemos que el acuerdo de campaña suponía que la actual vice manejaría esas áreas. Si la foto trucada de comienzos de semana (que llamativamente mostraba a un Milei más alto), intentaba mostrar que todo estaba bien en el binomio, los dichos vicepresidenciales lograron desactivar el virtual intento.</p> <p>Lo llamativo del asunto, y a contramano de lo sucedido días atrás con el anuncio del tratamiento del DNU 70/23 en el Senado, cuando un ejército de trolls salió a vituperar a Villarruel, en esta ocasión la entrevista no fue revisada por las tropas libertarias de redes. ¿Aprendizaje o datos reservados de que “Vicky”, hoy, mide mejor que el presidente? Vaya uno a saber. A veces algunos silencios dicen demasiado.</p> <p>En la soledad de su construcción, y acá no nos referimos solamente a su centralidad, sino a la falta de “cuadros” que hagan política más allá de cierto institucionalismo que tiene proa al 25 de mayo, Milei no se priva de las contradicciones. De las que vienen del período electoral y de esas que viran el sentido de las afirmaciones en cuestión de horas.</p> <p>Si la promesa de campaña hacía referencia a “vouchers” que se otorgarían para que cada uno eligiera libremente a qué escuela mandar a sus hijos, en la semana conocimos que los dichos referían a un simple subsidio que sólo alcanza a una porción muy pequeña del universo prometido.</p> <p>https://twitter.com/OPRArgentina/status/1771334724948001156</p> <p>Para mayor demostración de los vaivenes discursivos, si el fin de semana se declaraba que el gobierno intentaría aprobar una reforma en el cálculo del pago a jubilados vía ley sancionada por el Congreso de la Nación, el viernes a la noche se anunciaba, vía comunicado de la OPRA, que se emitiría un nuevo DNU que otorgará “un aumento jubilatorio para el mes de abril, a partir de la licuación ocasionada por la fórmula sancionada por la anterior administración”. Nada dice de la propia inflación generada a partir de la asunción de Javier Milei (60%, sin contar marzo) y si eso tendrá algún tipo de compensación.</p> <p>Desarmar un entramado legal, alcanzado con los consensos que impone la democracia, y no pensada para la inflación galopante que hemos sabido conseguir y que expresa la voluntad de UNO en nombre de cierta celeridad, se parece más al intento desesperado de evitar un acuerdo legislativo (que no está lejos) que le imponga al oficialismo otro marco legal que no sea de su agrado.</p> <p>Se avecina el 24 de marzo y ante lo que será, seguramente, una movilización de proporciones, el oficialismo hizo circular el globo de ensayo de que se prepara un indulto para el conjunto de represores juzgados y encarcelados, como así también para aquellos que aún están en proceso. Rápidamente, buena parte del entramado del sistema político y de la sociedad civil, recordó el carácter ilegal de la medida, violatoria de no pocos acuerdos y tratados internacionales que ha suscripto el Estado nacional. Parece que la contundente respuesta sirvió para sacar el tema de agenda, no sin antes haber eliminado el acto oficial que era costumbre, a la par de desechar la idea de cualquier sorpresa que termine activando mayores malestares, circunscribiéndose el aporte oficial a un mero video que intentará reflotar la teoría de los dos demonios. Más allá de los intereses de la vicepresidenta, el mundo libertario no tiene ningún interés en el tema y lo más seguro es que, velozmente, quiera pasar pantalla.</p> <p>https://twitter.com/abuelasdifusion/status/1771879620687593854</p> <p>El mileismo se considera protagonista de un momento único e histórico. Creen en la versión antojadiza que llegó para refundar la Argentina desde sus cimientos y en ese devenir, desarmar todo atisbo de vida comunitaria, plena y para todos. Por estas horas asistimos a la temeraria promesa de la eliminación de miles de puestos de trabajo en el sector estatal. Por goteo que incluyen cientos de telegramas, que se dirigen a personas que exceden la lógica de la planilla de Excel, decenas de áreas del Estado que no casualmente han adolecido de los nombramientos políticos de rigor, se enfrentan al dilema de su desaparición. Medios oficiales incluidos, eliminando la posibilidad de otra forma de comunicación que existe, que es real y que refiere a la Argentina profunda que nada tiene que ver con el día a día de las grandes urbes.</p> <p>Desarman un país, para que nosotros sangremos. Tal vez el domingo, con el inconmensurable ejemplo y guía de Madres y Abuelas, encontremos algo de calma y regocijo. A tientas, sin saber del todo que trole hay que tomar para seguir, pero con la inocultable convicción del NUNCA MÁS. Aunque ahora crean que puedan reversionar la historia a su antojo.</p> <p>(*) Analista político de Fundamentar - <a href="https://twitter.com/miguelhergomez" target="_blank" rel="noopener noreferrer">@miguelhergomez</a></p></div> El canibalismo va al casino 2024-03-17T12:02:25-03:00 2024-03-17T12:02:25-03:00 https://www.fundamentar.com/articulos/opinion/item/6808-el-canibalismo-va-al-casino Miguel Gómez (*) hola@fundamentar.com <div class="K2FeedImage"><img src="https://www.fundamentar.com/media/k2/items/cache/b5c004933697480545a6e268611ac01b_S.jpg" alt="Saturno devorando a su hijo" /></div><div class="K2FeedIntroText"></div><div class="K2FeedFullText"><p>Que la práctica política en la Argentina se ha convertido en una especie de canibalismo sin retorno, no es precisamente una novedad que vengamos a descubrir por estos días.  Para no irnos muy atrás en el tiempo (ni en las referencias ideológicas), la forma en que el extinto Frente de Todos, inicialmente estructuró al conjunto de las gestiones ministeriales, donde al interior de cada uno de ellos, se trataba de garantizar la presencia de los espacios políticos que sintetizaban la idea de la “unidad en la diversidad”, actuó como un severo limitante para imponer reformas, deterioro que se profundizó a partir de la derrota electoral de 2021. Pero lo novedoso de este lluvioso mediados de marzo, es que esa fagocitación entre propios, ya no se hace, por ejemplo, con la supuesta fortaleza que puedan representar los números en una legislatura (para el período 2019 – 2021 el FDT contaba con 109 diputados y 38 senadores propios); sino que se proyecta para buena parte del sistema político, con la oposición incluida. Recorrido por una semana de variados desgastes internos y de la inquebrantable convicción de no pocos protagonistas de jugarse algún pleno. Mientras esperamos la seca y el sol, pasen y vean. Están todos invitados.</p> <p>A nivel nacional, la noticia más importante vino de la mano del rechazo del Senado al Decreto de Necesidad y Urgencia nº 70/23, por un número de votos que el oficialismo no esperaba: 42 a 25. Esas cifras dejaron en un recuerdo muy lejano los acuerdos de diciembre donde la muñeca política de la vicepresidenta, habilitó una sobrerepresentación opositora en el control de las mayorías de las comisiones. Lo sucedido en la tarde del miércoles puede pensarse como la síntesis de tres factores que hoy componen la vida nacional.</p> <p>https://twitter.com/VickyVillarruel/status/1768431095878709624</p> <h4>1.      De la debilidad libertaria</h4> <p>Si bien el oficialismo cuenta con una muy baja representación legislativa (15%), la presente coyuntura del sistema político argentino no lo deja fuera de juego a la hora de imponer condiciones. Maneja los recursos del Estado nacional, está en condiciones de imponer agenda a partir de un reformado esquema comunicacional, vía medios tradicionales y redes, pero también, la atomización partidaria del conjunto, representa un factor que juega a su favor.</p> <p>El problema es otro. Es el que refiere (y esto lo planteamos en el más estricto análisis de cierta instrumentalidad política) al mal manejo de esa debilidad como un recurso, ya que en la vida, uno puede mentir, pero el problema es creerse su propia mentira. El presidente Javier Milei y buena parte de sus pocos pensantes acólitos, parece haberse creído la mentira estadística de ser el presidente más votado de la historia de los argentinos. Para ser un hombre que ha vivido de los números, parece ser una pobre significación de su persona: el 56% de los votos obtenidos los alcanzó en un ballotage y la elección de 2023 es la que más personas habilitó para votar. Las peras se comparan con peras y no con manzanas, aunque ambas sean producidas en el hermoso Alto Valle del Río Negro.</p> <p>Milei parece decido a jugar a la política con esa estrategia aunque ya atraviese la segunda derrota legislativa de importancia. A la queja oficialista de que “la casta” nunca había rechazado un DNU del kirchnerismo, vale recordarle que tampoco se hizo desde la reforma constitucional (lo cual incluye a sus circunstanciales aliados), y que, además, ninguna de estas propuestas resultaba definitivamente anticonstitucional como el esperpento legislativo que comentamos.</p> <p>El capítulo del rechazo senatorial del DNU mostró el error que suelen cometer no pocos gobiernos cundo sufren algunas derrotas: la victimización. Sobreexpuso al presidente a brindar un conjunto de notas diarias en medios afines, y potenció el canibalismo de atacar a la vicepresidenta Victoria Villaruel, porque había habilitado una sesión sobre la que ya no tenía demasiados elementos reglamentarios para seguir posponiendo.</p> <p>Desde plantear las dudas sobre su sexualidad, pasando por la acusación de traidora y al pedido de que debía ser colgada de la plaza, el combo comunicacional de redes expuso una violencia que ya es de manual y que obligó a la presidenta del Senado a grabar un discurso institucionalista donde trataba, otra vez, de deslegitimar la figura de Cristina Fernández de Kirchner, recurso que siempre puede “garpar” para cierto antiperonismo genético.</p> <p>https://twitter.com/GugaLusto/status/1768613722988187963</p> <h4>2.      De la atomización radical</h4> <p>La llegada de Martín Losteau a la conducción de la Unión Cívica Radical, pareció darle una nueva impronta al histórico partido. Lejos del perfil de un cada vez más desgastado Gerardo Morales que, a fuerza de convertirse en un emperador norteño ha terminado en el papelonezco rol de defender una mal entendida hombría, a partir de los rumores que circulan en la bella Jujuy; la llegada del ex ministro de Economía suponía una renovación que traería otros aires. Su voto de rechazo al DNU confirma todo lo contrario.</p> <p>El partido, que gusta verse a sí mismo como una garantía de cierta institucionalidad democrática, durante la semana emitió un comunicado que, de alguna manera, trataba de ser el sostén político de ese rechazo. El punto en cuestión es que la conducción dijo una cosa y buena parte de los conducidos dijeron otra, reflejando los límites que enfrenta el propio Losteau, que no sólo debió soportar el ataque de trolls y de periodistas generosamente cercanos al oficialismo, comentando situaciones personales y haciendo análisis psicológicos de inexistente valor; sino que fue alcanzado por el cuestionamiento público de dirigentes de la talla de Rodrigo De Loredo, presidente del bloque radical en la Cámara de Diputados y de Alfredo Cornejo, gobernador de la provincia de Mendoza.</p> <p>El episodio del DNU sirvió para mostrar que el partido se enfrenta a un presente político de contar sin una conducción que sintetice una idea común; lo expone a una serie de contradicciones históricas ya que, si se pretende erigir en el partido de la institucionalidad argenta, poco se entiende que unos cuantos referentes apoyen semejante esperpento jurídico, que no ha contado con el aval de ningún constitucionalista (de fuste y de los otros) y que viene a demostrar que la estrategia de escudarse detrás de la fortaleza que, en otros tiempos, representaba la escudería Juntos por el Cambio, ahora que esta feneció, de poco sirvió para salir más fortalecidos.</p> <p>https://twitter.com/Senadores_Todos/status/1768407667758821451</p> <h4>3.      De la (hipotética) unidad del PJ</h4> <p>Sabido es que el peronismo sufrió una derrota trascendente en las elecciones de noviembre. A lo largo de su historia, ha ejercido una práctica política donde los traspiés electorales rápidamente encuentran un padre sobre el que hacer recaer responsabilidades (ejemplo del machirulismo de otros tiempos). En el medio de ese proceso, el cual incluye los nombres propios de Alberto Fernández (presidente), Sergio Massa (candidato) o Cristina Fernández (vicepresidenta y jefa política de una minoría intensa), el partido trata de exponer la representación de aquellos sectores que peor la pasan (y pasarán) con el modelo económico libertario.</p> <p>En esta instancia de debilidad, el deterioro que comentamos puede servir de articulador de un fortalecimiento a partir de una única verdad que hoy puede sintetizarse en algo muy simple: sabe lo que no quiere.</p> <p>El rechazo a la ley ómnibus y al DNU sirve para mostrar una mínima identidad que no es poco para los tiempos que corren, más allá de las diferencias de posicionamiento que puedan exigir los gobernadores que deben gestionar sus territorios y los cantos de sirena que siempre están a la orden del día en un peronismo derrotado y que supone la reinterpretación histórica de lo que éste debería hacer de parte de personajes ya grotescos como Miguel Angel Pichetto y Guillermo Moreno.</p> <p>Los dos tienen la particular virtud de explicarnos al conjunto de los argentinos lo que el peronismo tendría que realizar, desde una posición bastante relativa de su peso político. El primero, porque luego de haberse disfrazado de cambiemista, no son pocos los que comenzaron a mirarlo de reojo en su capacidad de liderazgo legislativo, dado que en la semana que se va, no logró unificar el voto de su bloque en cuanto al intento de ir por una reforma de la ley previsional; y el otro, porque más allá de su histrionismo y rol de panelista televisivo, émulo del recorrido mileista, hace escasos siete meses, no alcanzó el mínimo establecido (más del 1.5% del padrón) para participar de las elecciones generales a presidente. Una cosa es tener visibilidad y otra muy distinta, espesura política.</p> <p>En el derrotero cotidiano, el canibalismo desarrollado se construye desde la mayor de las orfandades para el conjunto de los actores, apostando a un pleno en el casino. Bien lo saben Villarruel y Lousteau, que han sufrido las consecuencias de exponer diferencias con parte del sistema que los contiene.</p> <p>Milei apuesta todo al déficit cero y a la baja de la inflación a cualquier costo; el radicalismo, que extraña el cobijo de Juntos por el Cambio, se divide entre la cercanía y la distancia al Ejecutivo, siendo no pocos dirigentes, definitivamente funcionales al esquema libertario; y el peronismo, intenta reconstruirse de la oposición a un modelo económico que ya extraña los índices del reaparecido Martín Guzmán. Así de simple, así de severo. Queda en el pendiente la realidad de los amarillos de Mauricio Macri. Pero para ello, ya tendremos tiempo…</p> <p>(*) Analista político de Fundamentar - <a href="https://twitter.com/miguelhergomez" target="_blank" rel="noopener noreferrer">@miguelhergomez</a></p></div> <div class="K2FeedImage"><img src="https://www.fundamentar.com/media/k2/items/cache/b5c004933697480545a6e268611ac01b_S.jpg" alt="Saturno devorando a su hijo" /></div><div class="K2FeedIntroText"></div><div class="K2FeedFullText"><p>Que la práctica política en la Argentina se ha convertido en una especie de canibalismo sin retorno, no es precisamente una novedad que vengamos a descubrir por estos días.  Para no irnos muy atrás en el tiempo (ni en las referencias ideológicas), la forma en que el extinto Frente de Todos, inicialmente estructuró al conjunto de las gestiones ministeriales, donde al interior de cada uno de ellos, se trataba de garantizar la presencia de los espacios políticos que sintetizaban la idea de la “unidad en la diversidad”, actuó como un severo limitante para imponer reformas, deterioro que se profundizó a partir de la derrota electoral de 2021. Pero lo novedoso de este lluvioso mediados de marzo, es que esa fagocitación entre propios, ya no se hace, por ejemplo, con la supuesta fortaleza que puedan representar los números en una legislatura (para el período 2019 – 2021 el FDT contaba con 109 diputados y 38 senadores propios); sino que se proyecta para buena parte del sistema político, con la oposición incluida. Recorrido por una semana de variados desgastes internos y de la inquebrantable convicción de no pocos protagonistas de jugarse algún pleno. Mientras esperamos la seca y el sol, pasen y vean. Están todos invitados.</p> <p>A nivel nacional, la noticia más importante vino de la mano del rechazo del Senado al Decreto de Necesidad y Urgencia nº 70/23, por un número de votos que el oficialismo no esperaba: 42 a 25. Esas cifras dejaron en un recuerdo muy lejano los acuerdos de diciembre donde la muñeca política de la vicepresidenta, habilitó una sobrerepresentación opositora en el control de las mayorías de las comisiones. Lo sucedido en la tarde del miércoles puede pensarse como la síntesis de tres factores que hoy componen la vida nacional.</p> <p>https://twitter.com/VickyVillarruel/status/1768431095878709624</p> <h4>1.      De la debilidad libertaria</h4> <p>Si bien el oficialismo cuenta con una muy baja representación legislativa (15%), la presente coyuntura del sistema político argentino no lo deja fuera de juego a la hora de imponer condiciones. Maneja los recursos del Estado nacional, está en condiciones de imponer agenda a partir de un reformado esquema comunicacional, vía medios tradicionales y redes, pero también, la atomización partidaria del conjunto, representa un factor que juega a su favor.</p> <p>El problema es otro. Es el que refiere (y esto lo planteamos en el más estricto análisis de cierta instrumentalidad política) al mal manejo de esa debilidad como un recurso, ya que en la vida, uno puede mentir, pero el problema es creerse su propia mentira. El presidente Javier Milei y buena parte de sus pocos pensantes acólitos, parece haberse creído la mentira estadística de ser el presidente más votado de la historia de los argentinos. Para ser un hombre que ha vivido de los números, parece ser una pobre significación de su persona: el 56% de los votos obtenidos los alcanzó en un ballotage y la elección de 2023 es la que más personas habilitó para votar. Las peras se comparan con peras y no con manzanas, aunque ambas sean producidas en el hermoso Alto Valle del Río Negro.</p> <p>Milei parece decido a jugar a la política con esa estrategia aunque ya atraviese la segunda derrota legislativa de importancia. A la queja oficialista de que “la casta” nunca había rechazado un DNU del kirchnerismo, vale recordarle que tampoco se hizo desde la reforma constitucional (lo cual incluye a sus circunstanciales aliados), y que, además, ninguna de estas propuestas resultaba definitivamente anticonstitucional como el esperpento legislativo que comentamos.</p> <p>El capítulo del rechazo senatorial del DNU mostró el error que suelen cometer no pocos gobiernos cundo sufren algunas derrotas: la victimización. Sobreexpuso al presidente a brindar un conjunto de notas diarias en medios afines, y potenció el canibalismo de atacar a la vicepresidenta Victoria Villaruel, porque había habilitado una sesión sobre la que ya no tenía demasiados elementos reglamentarios para seguir posponiendo.</p> <p>Desde plantear las dudas sobre su sexualidad, pasando por la acusación de traidora y al pedido de que debía ser colgada de la plaza, el combo comunicacional de redes expuso una violencia que ya es de manual y que obligó a la presidenta del Senado a grabar un discurso institucionalista donde trataba, otra vez, de deslegitimar la figura de Cristina Fernández de Kirchner, recurso que siempre puede “garpar” para cierto antiperonismo genético.</p> <p>https://twitter.com/GugaLusto/status/1768613722988187963</p> <h4>2.      De la atomización radical</h4> <p>La llegada de Martín Losteau a la conducción de la Unión Cívica Radical, pareció darle una nueva impronta al histórico partido. Lejos del perfil de un cada vez más desgastado Gerardo Morales que, a fuerza de convertirse en un emperador norteño ha terminado en el papelonezco rol de defender una mal entendida hombría, a partir de los rumores que circulan en la bella Jujuy; la llegada del ex ministro de Economía suponía una renovación que traería otros aires. Su voto de rechazo al DNU confirma todo lo contrario.</p> <p>El partido, que gusta verse a sí mismo como una garantía de cierta institucionalidad democrática, durante la semana emitió un comunicado que, de alguna manera, trataba de ser el sostén político de ese rechazo. El punto en cuestión es que la conducción dijo una cosa y buena parte de los conducidos dijeron otra, reflejando los límites que enfrenta el propio Losteau, que no sólo debió soportar el ataque de trolls y de periodistas generosamente cercanos al oficialismo, comentando situaciones personales y haciendo análisis psicológicos de inexistente valor; sino que fue alcanzado por el cuestionamiento público de dirigentes de la talla de Rodrigo De Loredo, presidente del bloque radical en la Cámara de Diputados y de Alfredo Cornejo, gobernador de la provincia de Mendoza.</p> <p>El episodio del DNU sirvió para mostrar que el partido se enfrenta a un presente político de contar sin una conducción que sintetice una idea común; lo expone a una serie de contradicciones históricas ya que, si se pretende erigir en el partido de la institucionalidad argenta, poco se entiende que unos cuantos referentes apoyen semejante esperpento jurídico, que no ha contado con el aval de ningún constitucionalista (de fuste y de los otros) y que viene a demostrar que la estrategia de escudarse detrás de la fortaleza que, en otros tiempos, representaba la escudería Juntos por el Cambio, ahora que esta feneció, de poco sirvió para salir más fortalecidos.</p> <p>https://twitter.com/Senadores_Todos/status/1768407667758821451</p> <h4>3.      De la (hipotética) unidad del PJ</h4> <p>Sabido es que el peronismo sufrió una derrota trascendente en las elecciones de noviembre. A lo largo de su historia, ha ejercido una práctica política donde los traspiés electorales rápidamente encuentran un padre sobre el que hacer recaer responsabilidades (ejemplo del machirulismo de otros tiempos). En el medio de ese proceso, el cual incluye los nombres propios de Alberto Fernández (presidente), Sergio Massa (candidato) o Cristina Fernández (vicepresidenta y jefa política de una minoría intensa), el partido trata de exponer la representación de aquellos sectores que peor la pasan (y pasarán) con el modelo económico libertario.</p> <p>En esta instancia de debilidad, el deterioro que comentamos puede servir de articulador de un fortalecimiento a partir de una única verdad que hoy puede sintetizarse en algo muy simple: sabe lo que no quiere.</p> <p>El rechazo a la ley ómnibus y al DNU sirve para mostrar una mínima identidad que no es poco para los tiempos que corren, más allá de las diferencias de posicionamiento que puedan exigir los gobernadores que deben gestionar sus territorios y los cantos de sirena que siempre están a la orden del día en un peronismo derrotado y que supone la reinterpretación histórica de lo que éste debería hacer de parte de personajes ya grotescos como Miguel Angel Pichetto y Guillermo Moreno.</p> <p>Los dos tienen la particular virtud de explicarnos al conjunto de los argentinos lo que el peronismo tendría que realizar, desde una posición bastante relativa de su peso político. El primero, porque luego de haberse disfrazado de cambiemista, no son pocos los que comenzaron a mirarlo de reojo en su capacidad de liderazgo legislativo, dado que en la semana que se va, no logró unificar el voto de su bloque en cuanto al intento de ir por una reforma de la ley previsional; y el otro, porque más allá de su histrionismo y rol de panelista televisivo, émulo del recorrido mileista, hace escasos siete meses, no alcanzó el mínimo establecido (más del 1.5% del padrón) para participar de las elecciones generales a presidente. Una cosa es tener visibilidad y otra muy distinta, espesura política.</p> <p>En el derrotero cotidiano, el canibalismo desarrollado se construye desde la mayor de las orfandades para el conjunto de los actores, apostando a un pleno en el casino. Bien lo saben Villarruel y Lousteau, que han sufrido las consecuencias de exponer diferencias con parte del sistema que los contiene.</p> <p>Milei apuesta todo al déficit cero y a la baja de la inflación a cualquier costo; el radicalismo, que extraña el cobijo de Juntos por el Cambio, se divide entre la cercanía y la distancia al Ejecutivo, siendo no pocos dirigentes, definitivamente funcionales al esquema libertario; y el peronismo, intenta reconstruirse de la oposición a un modelo económico que ya extraña los índices del reaparecido Martín Guzmán. Así de simple, así de severo. Queda en el pendiente la realidad de los amarillos de Mauricio Macri. Pero para ello, ya tendremos tiempo…</p> <p>(*) Analista político de Fundamentar - <a href="https://twitter.com/miguelhergomez" target="_blank" rel="noopener noreferrer">@miguelhergomez</a></p></div>